Nueva York es famosa por su icónico horizonte y su vibrante escena cultural, pero también es un paraíso para los amantes de la naturaleza y los aventureros urbanos. Ya sea que estés admirando las vistas panorámicas desde sus imponentes rascacielos, explorando islas cargadas de historia o disfrutando de un tranquilo crucero por Manhattan, la ciudad te ofrece un sinfín de posibilidades para disfrutar del aire libre.
¿Hay muchas atracciones al aire libre que visitar en Nueva York?
Nueva York está repleta de atracciones al aire libre, cada una ofreciendo una manera única de conectarte con los diversos entornos de la ciudad. Más allá de los paisajes urbanos que uno espera, la ciudad sorprende con una gran variedad de espacios al aire libre, desde actividades junto al río hasta amplios parques públicos. Cada zona de Nueva York -desde Manhattan hasta los distritos más alejados- ofrece oportunidades para disfrutar del aire libre, ya sea que busques paseos tranquilos, rutas interesantes o simplemente un lugar donde observar el bullicio de la ciudad.
Estas atracciones te permitirán experimentar la energía de Nueva York mientras te sumerges en la naturaleza y la historia, mostrando cómo la ciudad combina su encanto metropolitano con espacios abiertos accesibles y agradables.
6 actividades al aire libre que no te puedes perder en tu visita a Nueva York
Explorar los espacios al aire libre de Nueva York es una aventura emocionante, llena de lugares emblemáticos y joyas ocultas. No querrás perderte estas seis actividades, que van desde altísimas plataformas de observación hasta verdes y extensos parques.
1. Disfruta de unas vistas espectaculares en The Edge at Hudson Yards
Ubicado en la planta 100 del número 30 de Hudson Yards, The Edge ofrece una experiencia visual inigualable. Es la terraza al aire libre más alta del hemisferio occidental y se extiende hacia el cielo, brindando a los visitantes unas vistas panorámicas asombrosas del horizonte de Nueva York, los ríos y más allá. La escalera exterior, el suelo y las paredes de cristal aumentan la emoción, haciendo que cada ángulo sea un nuevo descubrimiento. The Edge no es solo vistas; es una maravilla arquitectónica que ofrece una perspectiva única de la ciudad, literalmente colgando del borde.
2. Toma un ferry a Liberty y Ellis Island
Un viaje a las islas de la Libertad y Ellis es un homenaje profundo a la rica historia de inmigración de Nueva York y a sus perdurables símbolos de libertad. El trayecto en ferry comienza con impresionantes vistas del puerto de Nueva York, ofreciendo una oportunidad excepcional para fotografiar el cambiante perfil de la ciudad. Al llegar a Liberty Island, te dará la bienvenida la Estatua de la Libertad en todo su esplendor. Puedes explorar el recinto, visitar el museo y ascender hasta la corona para contemplar de cerca esta icónica figura.
Muy cerca, Ellis Island abre sus puertas a las fascinantes historias de millones de personas que pasaron por allí en busca de nuevos comienzos en América. El museo de la isla exhibe numerosos artefactos y exposiciones interactivas, ofreciendo una inmersión profunda en las historias personales que dieron forma a la nación.
3. Crucero turístico Circle Line
Tomar un crucero turístico de Circle Line es una forma ideal de ver Nueva York desde una perspectiva diferente. Estos cruceros, aptos para todas las edades, ofrecen una manera relajada pero informativa de contemplar los principales monumentos de la ciudad a lo largo de los ríos Hudson y East. Durante el recorrido, los guías comparten historias y datos sobre la historia y la arquitectura de Nueva York, haciendo paradas o lentas pasadas por lugares emblemáticos como la Estatua de la Libertad, Ellis Island y el puente de Brooklyn. Tanto si eliges un crucero completo por la isla como un viaje más corto, cada uno te brinda una perspectiva única del impresionante perfil de la ciudad y de la bulliciosa actividad a orillas del río.
4. Sube al mirador Top of the Rock y alucina con las vistas
El mirador Top of the Rock es uno de esos lugares que simplemente no te puedes perder en Nueva York. Desde el Rockefeller Center, te ofrece tres plataformas de observación con unas vistas de 360 grados que quitan el aliento. Imagina ver el Empire State Building y Central Park desde lo alto, con todo el skyline de la ciudad desplegado ante ti. Las terrazas son amplias, así que puedes tomarte tu tiempo para disfrutar de cada detalle sin sentirte apurado. Ya sea de día o de noche, cada momento aquí tiene su magia, desde el vibrante bullicio del día hasta la ciudad iluminada en la oscuridad.
5. Sumérgete en la energía de Times Square
Times Square no es solo una intersección concurrida, es el corazón palpitante de Nueva York. Sus gigantescas pantallas de neón y la marea de gente que nunca se detiene te harán sentir la verdadera esencia de la ciudad que nunca duerme. Aquí, puedes dejarte llevar por el ritmo frenético de sus calles, explorar tiendas emblemáticas, ver los icónicos teatros de Broadway o disfrutar de los espectáculos callejeros que le dan a Times Square su carácter único.
Y si te gusta la fiesta, no puedes perderte la famosa caída de la bola en Nochevieja, un evento que atrae a personas de todo el mundo para despedir el año en el epicentro de la acción. Visitar Times Square es empaparte del espíritu de Nueva York, viviendo su energía vibrante y contagiosa tanto de día como de noche.
6. Relájate en los parques más hermosos de Nueva York
Cuando necesites un respiro del ajetreo urbano, los parques de Nueva York te ofrecen el refugio perfecto. Central Park es el alma verde de la ciudad, con sus serpenteantes caminos, lagos tranquilos y amplias praderas, ideales para un picnic o un paseo relajante. Si prefieres un ambiente más tranquilo, dirígete a Prospect Park en Brooklyn, donde podrás disfrutar de amplias zonas naturales y deportivas, pero con menos multitudes.
Otros parques más pequeños, como Bryant Park y Washington Square Park, son auténticas joyas escondidas donde puedes desconectar, observar la vida de la ciudad pasar o incluso disfrutar de actuaciones espontáneas. Cada uno de estos parques tiene su propio encanto, convirtiéndolos en paradas obligatorias para quienes buscan un oasis de calma en medio del caos urbano.
¿Cuándo es el mejor momento para explorar Nueva York al aire libre?
Si quieres disfrutar al máximo de las maravillas al aire libre en Nueva York, la primavera (de abril a junio) y el otoño (de septiembre a principios de noviembre) son tus mejores opciones. Durante estas estaciones, el clima es suave, con temperaturas agradables y pocas lluvias, lo que las convierte en el momento ideal para recorrer parques, hacer cruceros y pasear por la ciudad. En primavera, te deslumbrará la explosión de flores y el verdor fresco, mientras que en otoño, el aire fresco y el follaje en tonos dorados y rojizos crean el escenario perfecto para cualquier aventura al aire libre.
Comienza tu aventura al aire libre en Nueva York con las entradas CityPASS
Inicia tu recorrido al aire libre en Nueva York con las entradas New York CityPASS®. Es la manera más fácil de disfrutar de algunas de las mejores atracciones y actividades al aire libre de la ciudad, ¡y con un gran ahorro! Con CityPASS®, tendrás acceso a lugares icónicos como la Estatua de la Libertad, el Top of the Rock y mucho más. Simplifica tus planes y aprovecha al máximo tu visita desde hoy mismo.
Alojamiento en Nueva York
Para que tu experiencia en Nueva York sea aún mejor, te recomendamos buscar alojamiento cerca de las principales atracciones de la ciudad. Echa un vistazo a este mapa para encontrar el lugar perfecto para ti:
Booking.com